Cuando llega el verano nuestra vida cambia, los días son más largos, no tenemos que estudiar, viajamos, conocemos gente nueva, etc. Muchas personas en esta etapa del año, tan diferente al resto, conocen a su “amor de verano”. Pero ¿existe de verdad o solo existe en las películas de amor?
En mi opinión, sí existen esos amores de verano, pero no se suelen parecer a los amores de verano de las películas. Pero si es verdad que en verano conocemos a más gente y realizamos más actividades. Al ser una etapa tan corta, ese amor que sientes es muy intenso y más emocionante, ya que la idea de que ese tiempo se acaba, de que solo vais a estar juntos un mes o más, hace que lo vivamos todo mucho más rápido e intenso.
Muchas veces estos amores no duran más allá del verano puesto que, al terminar el verano, todos volvemos a la rutina, es decir, a estudiar, a volver a tener esas obligaciones que de después del verano y, aunque en verano ese amor haya sido intenso, cuando volvemos a la rutina se empieza a enfriar. Y eso no quiere decir que no haya sido verdadero. Porque hay amores que, aunque no hayan sido para siempre, realmente nos marcan para siempre.
También hay algunos casos en los que este amor de verano puede durar más allá del verano ya que esas personas siguen en contacto, se visitan o mantienen una relación a distancia. No es lo más habitual pero hay muchos casos en los que ocurre esto. Y cuando eso sucede, se demuestra que no solo fue una bonita historia de verano, sino el inicio de una relación real.
En resumen, los amores de verano existen, aunque cada persona lo vive de una manera diferente. Algunos son cortos pero muy apasionados y se quedan solo en un recuerdo, y otros se convierten en una relación duradera. Lo importante de todo esto es lo que sentimos mientras dura esa bonita historia y lo que nos enseña. Al fin y al cabo, el verano también es una época para vivir y disfrutar e incluso para recordar.
Elena Ruiz de la Cruz, 1º de Bachillerato A.jpeg)
No hay comentarios:
Publicar un comentario